Palomas (Música: Javier González/ Letra: Patricia Barone)
Yo tuve un despertar de cielos tibios
y tuve una sonrisa embelesada.
Con toda la inocencia del que espera
no supe adivinar la puñalada.
Fui musa de poemas esenciales.
Pensé, reí y jugué por las esquinas.
La noche me invadió las claridades,
destino de atropello y pesadilla.
Lo frágil se abisma en tus manos absurdas.
Lo bello enmudece y no calma tu sed.
Lo tierno no cabe en tu pobre equipaje.
No habrá quién libere tu cárcel de ser.
Yo tuve las pasiones florecidas
en todos los oasis del planeta.
No importa de qué raza o de cuál credo
yo anduve amamantando vida nueva.
Fetiche de la historia y sus pecados
me echaron al zanjón de las tinieblas.
Los socios del ocaso y sus madamas
rifaron mi pudor por tres monedas .
Lo frágil se abisma en tus manos absurdas.
Lo bello enmudece y no calma tu sed.
Lo tierno no cabe en tu pobre equipaje.
No habrá quién libere tu cárcel de ser.
Algunas esposadas, otras muertas
vivimos en el sur de la agonía.
Volvemos disfrazadas de palomas
al útero indolente de los días.
Se trata de abatir la hipocresía
del mundo nauseabundo que nos hiere.
Estamos a la espera de un abrazo.
No somos de aflojar. Somos mujeres.
Mujeres silvestres, mujeres de nadie.
Feroces candiles de la libertad.
Iremos sembrando verdades con alas,
un nuevo horizonte que germinará.